Monks declaró que la huelga del día 29 es importante no sólo para España, sino para toda Europa, guyos gobiernos, atemorizados después de los problemas griegos, han tomado unas medidas brutalmente regresivas. En este sentido subrayó que las medidas tomadas por el gobierno español son las más duras que ha tomado ningún gobierno europeo contra los trabajadores, con la excepción de Grecia.
Finalizó su intervención afirmando que el movimiento sindical español está marcando el paso en Europa: "Hagamos del 29 de septiembre una plataforma para el progrerso de España y de toda Europa."
Cándido Méndez fue coreado con gritos de "Zapatero embustero" cuando recordó las frases del Presidente sobre "salir juntos de la crisis, con "más cohesión social" y recordó que los mercados chantajean, pero no votan.
Por su parte, el Secretario General de CCOO afirmó que "Es intolerable que desde un Gobierno de izquierdas se actúe como cualquier partido de derechas". Se mostró muy crítico con la política del Gobierno, al que acusó de pretender "vender a la ciudadanía una ideología fracasada". "Pasado el momento de pánico - algunos parecían comunistas por un día cuando pidieron un paréntesis en el capitalismo, ha recordado - ahora, cuando creen que la crisis ha quedado atrás, se han apresurado a introducir la idea de que Europa no puede competir si no es eliminando los derechos laborales y el Estado de Bienestar", explicó el secretario general de CCOO, para quien "no podemos salir de la crisis reproduciendo la política que la ha provocado". "El objetivo es demoler la negociación colectiva y la organización de los trabajadores", subrayó Toxo.
El secretario general de CCOO se ha mostrado contundente cuando ha recordado que los 4,6 millones de parados no lo son por voluntad propia. Según Toxo, no se les puede criminalizar cuando además el Gobierno no está en condiciones de garantizar ofertas de empleo - "no se pueden rechazar ofertas ni programas de formación que no existen" -, lo que quieren es seguir con la reforma de la protección del desempleo.
"Porque nos sobran las razones, más tarde o más temprano el Gobierno se verá obligado a cambiar su política. La reforma laboral es reversible", concluyó entre aplausos y gritos de apoyo a la huelga general.







