
Para CCOO la decisión de la reunión del Eurogrupo de establecer que el déficit público español se reduzca, en 2012, al 5,3%, en lugar de al 5,8% como pretendía el Gobierno español, es una nueva muestra del empecinamiento de los responsables de las instituciones políticas europeas en una política evidentemente fracasada en sus objetivos económicos y que está produciendo efectos devastadores en el empleo y en los niveles de pobreza y cohesión social de España y otros muchos países de la UE.