
La subida de tasas universitarias y de formación profesional, y la Ley Orgánica para la mejora de la calidad educativa requieren una respuesta masiva en las calles.
CCOO se ha movilizado en todo momento contra los recortes y en defensa de la educación pública y de calidad. El sindicato entiende la motivación que lleva al alumnado a promover movilizaciones en contra de la falta de posibilidades para seguir estudiando, con la disminución drástica de las ayudas económicas y sin una perspectiva de futuro clara.
CCOO cree que el Gobierno ha emprendido un ataque a la educación pública en dos frentes: los recortes de gasto y la reforma de la ley educativa. El primero ha supuesto un comienzo de curso educativo en el que el alumnado universitario se ha visto excluido en su acceso a los estudios por la enorme subida de tasas, que no ha repercutido en una mayor financiación para los centros. Por su parte, las enseñanzas primaria y secundaria padecen una enorme reducción de gasto, materializada especialmente en la destrucción de empleo entre el profesorado, el empeoramiento de sus condiciones laborales y las consiguientes masificaciones en las aulas, que conllevarán una pérdida de calidad de la educación. Por otro lado, la LOMCE responde a la agenda ideológica del Partido Popular que ataca la igualdad de oportunidades en la educación y apuesta por trayectorias formativas segregadoras y clasistas.
El sindicato apoya las movilizaciones convocadas por una pluralidad de asociaciones estudiantiles y plataformas para los próximos días, incluyendo las jornadas de lucha del 11 de octubre y de los días 16, 17 y 18 del mismo mes. La sociedad española ha luchado y trabajado enormemente por la constante mejora de la educación pública como garante de progreso social e individual, y CCOO no va a permitir que el Gobierno acabe con los avances registrados desde 1978.