Las distintas movilizaciones convocadas en todos los sectores educativos no le están sentando nada bien al Ministro de Educación.
A juicio de CCOO, la política educativa y económica del gobierno del Partido Popular están destruyendo la educación pública y los derechos laborales de los profesionales que en ella trabajan.
La exigencia de consolidación fiscal que el Ministro mantiene como excusa para mantener los recortes educativos, desde CCOO, entendemos que no es cierta. Ha habido comunidades, gobernadas por el Partido Popular, que ya empezaron a realizar recortes hace dos cursos. Medidas que se han ido generalizando tras los resultados de las elecciones autonómicas y que han tenido su colofón con la llegada al gobierno estatal del sr Rajoy. Por tanto, entendemos, que es la línea política del PP y que nada tiene que ver con la reducción del déficit. Por otro lado, nos parece curioso que sean 10.000 millones los que se van a inyectar a Bankia y sea precisamente esa cantidad la que se recorta en sanidad y educación.
La Federación de Enseñanza de CCOO entiende que el Ministro de Educación no comparta el análisis que de los datos oficiales realizamos, pero desde el sindicato queremos dejar claro que CCOO no manipula datos oficiales (OCDE, Presupuestos generales y Presupuestos Autonómicos), es más, siempre pretendemos ser muy rigurosos en todos las publicaciones, investigaciones y análisis de datos que forman parte de nuestra acción sindical.
Insistimos, con la mayor claridad posible, que sólo tenemos perjuicios con la política de recortes, desprestigio y desmantelamiento de la educación pública, que está llevando actualmente este ministerio.
Y a pesar de todo, no deja de resultarnos curioso, como el Sr Wert califique las medidas recogidas en el RDLey 14/2012 como “las menos perjudiciales para el sistema educativo” cuando son, como bien es sabido por toda la comunidad educativa, de todo lo contrario.
Acaso, ¿el aumento de ratios, la disminución en la opcionalidad del bachillerato, la no cobertura de bajas del profesorado (hasta pasados quince días), el aumento de la jornada lectiva del profesorado, el aumento de las tasas académicas en la universidad, la disminución en la partida presupuestaria de becas y ayudas al estudio, la no implantación de los nuevos títulos de FP… no son medidas que perjudican claramente la calidad de la educación?
A nuestro pesar, claramente sí. Todas estas medidas incidirán negativamente en el objetivo final de la reducción del abandono escolar, contrariamente a lo que viene manifestando Wert de manera reiterada e impedirán, por tanto, cumplir los objetivos de educación para 2020.
En 2011 la tasa de abandono, datos del Ministerio de Educación, se ha rebajado hasta el 26%, lejos aún, evidentemente, del objetivo del 10%.
También, es interesante recordar que las tasas de abandono escolar en nuestro país aumentó 7,2 puntos entre los años 2000 y 2009 y actualmente está en el 31,2%, es decir, el doble de la media de la UE. No podemos olvidar que estos datos coinciden con la época de expansión de la burbuja inmobiliaria en la que nuestro país ha estado sumido. Los jóvenes abandonaban el sistema educativo a cambio de trabajos en el sector terciario (construcción, turismo o servicios) que les proporcionaban remuneraciones que no exigían titulación alguna. Al hundirse la construcción, se perdieron también cientos de miles de puestos de trabajo.
Igualmente, también es reseñable, los datos de Bruselas, los cuales inciden en que el problema del abandono prematuro de la formación en nuestro país afecta especialmente a los inmigrantes en comparación con los nativos (45% frente al 27%).
Lo que sí nos gustaría recordarle al Ministro de Educación, que parece olvidarlo con frecuencia, es la recomendación que hace la Comisaria de Educación de la UE: “ España, Portugal y Malta deben invertir más y adoptar más medidas que el resto de países para rebajar dichas tasas y hay que ofertar a estos jóvenes que han abandonado el sistema una segunda oportunidad para volver a los estudios” manifiesta Vassilou (recomendación que CCOO comparte plenamente).
En definitiva, CCOO no habla ni da datos con “prejuicios”, hablamos de realidades, y en estos dos últimos años, insistimos, sólo estamos comprobando pérdida de profesorado en los centros con la consiguiente destrucción de empleo, menor inversión educativa en los presupuestos educativos , pérdida de calidad en la educación, privatización de servicios educativos, aumento de tasas universitarias, mayor número de alumnado por aula, etc. Esta es nuestra triste realidad.
