
El anuncio ayer de la consejera de Presidencia y Justicia de aplicar un recorte salarial a las empleadas y los empleados públicos para corregir el desfase presupuestario que se ha generado en la Comunidad de Madrid, no se puede calificar más que como "atraco" a todas las personas que prestan sus servicios en la Administración madrileña.